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Antes de su inicio en el Cicero Stadium, la edición 2013 de los

Guantes de Oro de Chicago

, el principal torneo de boxeo amateur del Medio Oeste, lucía extraño ante la ausencia de los dos mejores púgiles locales, Shawn Simpson y Kenny Sims, que prefirieron concentrarse en competencias internacionales a un nivel superior.

Y otra cosa extraña ocurrió durante el transcurso del torneo pues el protagonista más ilustre de la competencia decidió no presentarse el día de la final. Eduardo Martínez, un nicaragüense de origen que hoy es ciudadano de Estados Unidos, clasificó para la última ronda de las 123 libras dejando atrás a Kevin Martínez, un difícil rival del gimnasio Jawbreakers, pero luego (una semana atrás) ganó el campeonato nacional en Spokane, estado de Washington, y prefirió concentrarse en otros objetivos.

“Ya gané los Guantes de Oro dos veces”, dijo Martínez, quien reside en Aurora pero entrena en Ogden Park con Kenny Sims Sr., padre del boxeador amateur del mismo nombre. “Esta semana estoy descansando porque me voy el lunes (ayer) a Colorado a entrenar con el equipo nacional”. Martínez estará en el Mundial de Kazakhstán en octubre y desde ahora estará dedicado a las competencias internacionales.

A pesar de estas ausencias el torneo mostró momentos de interés. En el peso completo, por ejemplo, hubo un gran espectáculo con una polémica que continuó abajo del ring. Shawndell Winters (Matadors), campeón en 2012 tras derrotar a Armando Piña en la primera ronda, pareció llevar la mejor parte ante Nick Mazurek (Sam Colonna), quien fue declarado ganador por decisión.

Mientras Winters no salía de su asombro, Mazurek bajó del ring eufórico mientras gritaba, “soy un chico de la escuela secundaria, tengo sólo 18 años y estoy peleando contra hombres grandes”, al tiempo que unos 30 seguidores bajaban de las tribunas para felicitarlo.

Entonces los seguidores de Winters se acercaron para decir que habían sido “robados” mientras Mazurek continuaba con su arenga, a los gritos: “Todos los días tomo el Metra desde Palatine, después la Línea Naranja y voy a entrenar al sur de Chicago. Este señor (su entrenador Sam Colonna) es el mejor del Medio Oeste, si no fuera por él, yo no estaría aquí”.

Winters siguió a su rival hasta un rincón del gimnasio mientras le gritaba que él había ganado la pelea. Mazurek le respondió que lo respetaba y extendió su mano en señal amistosa. Winters no la aceptó y prosiguió: “Yo gané, tú tienes sangre en la cara, yo no”. Finalmente la seguridad del estadio se interpuso entre los boxeadores y sus seguidores y prácticamente echó al público hacia la calle.

En otras categorías hubo campeones de 2012 que no pudieron retener sus títulos. Martez McGregor (Sam Colonna) perdió la final de las 178 libras ante Anthony Harris (Garfield Park) y José Quezada (Scottsdale Park), titular de las 141 libras en 2012, resignó su corona frente a Eddie Ramírez, del gimnasio Torres de Aurora, quien se llevó además el premio al mejor boxeador del torneo.

Saúl Cano, un jovencito de Aurora y del gimnasio Torres, que ganó en las 108 libras, también fue una de las nuevas caras que confirmaron que este año prevaleció una “nueva guardia” en el torneo. “La final (contra Omar Brown, de Harvey) la tomé como una pelea más, yo pienso así, no me agüito”, señaló Cano, un hijo de tapatíos, de 17 años, que estudia en Oswego High School. “Ahora voy a ir a los Nacionales en Salt Lake City, Utah. Mi entrenador (el ex policía Jesse Torres) es muy bueno y siempre me lleva gratis. Una vez me llevó 16 horas a pelear en Alabama”. Cano ya fue segundo a nivel nacional en las 106 libras (15 a 16 años) en 2011.

En las 132 libras hubo un campeón con grandes aspiraciones. Giovanni Cabrera (Argo Summit), un estudiante de cine en College of DuPage de apenas 18 años, nacido en Seattle, Washington, de padre mexicano y madre americana, se llevó el título ante Brandon Ramírez. “Quiero ser un gran campeón mundial de peso ligero como Julio César Chávez o Durán”, dijo Cabrera, quien tiene un record de 16-1. ¿Y el cine? “Si me va bien con el boxeo, ya voy a tener dinero para hacer películas”.

Además de los campeones de la división Open, la más competitiva, el torneo mostró algunas promesas en las categorías menores. En las 147 libras, novatos, se coronó Javier Corona, quien se mantiene invicto como amateur. “No pienso perder”, insistió el joven estudiante de la secundaria Larkin en Elgin. “Terminando esto ya voy para la Open”.

En la rama femenil se consagró Kristin Gearhart en las 141 libras. La promesa de Sam Colonna, que piensa ahora pasar al profesionalismo, obtuvo su sexto título de los Guantes de Oro sin despeinarse: su rival Carla Figueroa, del gimnasio Warehouse, no se presentó para la final.

Finales Guantes de Oro de Chicago 2013 (División Open)

108 libras: Saúl Cano (Torres) venció por decisión a Omar Brown (Harvey)

114 libras: Christian Williams (Boxer 4 Boxers) por dec. a Joshua Greel (Heavy Hitter)

123 libras: Frankie Agnew (Harvey) a Eduardo Martínez (Destroyers) por no presentación

132 libras: Giovanni Cabrera (Argo Summitt) por dec. Brandon Ramírez (Ortiz)

141 libras: Eddie Ramirez (Torres) por dec. a José Quezada (Scottsdale Park)

152 libras: Vernon Demetrius Brown (Sam Colonna) por dec. a Rockeith Brown (Luyando)

165 libras: Paul Robinson (Fuller Park) por dec. a Ray Corona (Garfield Park)

178 libras: Anthony Harris (Garfield Park) por dec. Martez McGregor (Sam Colonna)

201 libras: Nick Mazurek (Sam Colonna) por dec. A Shawndell Winters (Matadors)

Más de 201 libras: Derrick Durr (Pit Bull) por KOT1 a Geoff Metzger (Sam Colonna)

Premio al mejor boxeador del torneo:

Eddie Ramirez (Torres)

Mejor Equipo:

Gimnasio de Sam Colonna. Fist Law fue segundo

Todos los campeones de la división Open clasificaron para el campeonato nacional de Salt Lake City, Utah, que comenzará el 12 de mayo.