CHICAGO – Los Chicago Bulls arrancaron el miércoles la temporada de la NBA machacando 104-80 a los New York Knicks en el Madison Square Garden. No se podía empezar mejor, pero ahora vuelven a casa para abrir (7pm) el United Center y recibir a los poderosos Cleveland Cavaliers de LeBron James.
Bulls y Cavaliers son los dos grandes favoritos a pelear por la corona de la Conferencia Este esta temporada, por lo que este partido puede ser considerado una final anticipada o al menos un buen examen para ambos conjuntos.
El pasado 20 de octubre, los Bulls perdieron 107-98 ante los Cavaliers en partido de pretemporada disputado en Columbus. Sin embargo, el duelo de estrellas lo ganó Chicago ya que Derrick Rose acabó con 30 puntos y James con 18 puntos.
“Los Bulls son mejor equipo que nosotros ahora mismo. Llevan juntos mucho tiempo y a nosotros nos queda mucho camino por delante”, dijo James.
La historia este viernes será muy diferente, empezando porque el partido ya es de fuego real y los Bulls querrán brindarle la victoria a su afición. Y además, porque el que salga victorioso se llevará un triunfo psicológico muy importante.
Los Cavaliers arrancaban este jueves noche recibiendo a los Knicks, por lo que el factor cansancio, aunque estemos a principio de temporada, también puede pasarle factura a Lebron y compañía.
Los Bulls llegan eufóricos tras la victoria ante los Knicks, donde el ala-pívot español Pau Gasol (21 pts y 11 reb.) y la banca (55 pts) liderada por Taj Gibson fueron los grandes protagonistas. Mientras que Rose, que reaparecía en partido oficial tras dos años ausente, tuvo un partido discreto sumando con 13 pts (3-7) en 23 minutos. Demostrando que todavía necesita partidos para recuperar su antiguo nivel.
“Creo que (a Rose) le hemos quitado mucho peso de encima porque tenemos muchas armas, por lo que no tiene la presión de tener que anotar muchos puntos y forzar para hacer cosas”, afirma Gasol.
El alero Jimmy Butler probablemente se pierda su segundo partido y no pueda jugar ante Cleveland, lo que es una gran baja sobre todo en defensa. Aunque la banca está luciendo muy bien y Kirk Hinrich volvería a tomar su lugar.
“Cuando las cosas fluyen como hoy (ante los Knicks), la gente se puede dar cuenta que en conjunto como equipo tenemos mucha profundidad”, dijo Rose.
Los Cavaliers, tras el regreso del hijo pródigo LeBron, traen un equipo muy potente este año donde también destacan el ala-pívot Kevin Love, los bases Kyrie Irving y Mike Miller y el pívot brasileño Anderson Varejao. Su objetivo es festejar su primer título desde que nacieron como franquicia en 1970. Pero primero tendrán que tumbar a los Bulls.