CHICAGO –
La trabajada victoria (97-92) del pasado martes ante los Washington Wizards fue una buena demostración de los diferentes ajustes, lo sumamente peleado y a cara de perros que van a ser los partidos y el cambio de juego que han tenido que realizar los
para no desmoronarse ante el aluvión de lesiones que han sufrido en este último tramo de temporada.
“Con tantas lesiones nuestro estilo de juego ha cambiado un poco”, afirma
, ala-pívot español de los Bulls. “Te tienes que adaptar a los jugadores que tienes disponibles. Ahora estamos haciendo un juego más directo, sobre todo aprovechando la velocidad de (Aaron) Brooks, moviendo el balón, intentando conseguir tiros fáciles para nuestros tiradores y sobre todo defendiendo todos a tope”.
Los Bulls en estos momento están muy mermados con las bajas por lesión de
(rodilla), segundo máximo anotador del equipo y líder en asistencias; Jimmy Butler (codo), máximo anotador y motor del equipo, y Taj Gibson (tobillo), sexto hombre y tercer máximo anotador y reboteador del equipo. Es decir, tres pilares con los que no se podrá contar todavía por cinco semanas más en el caso de los dos primeros, y una semana más para el tercero.
“Los partidos ahora hay que ganarlos con el esfuerzo colectivo”, afirma Tom Thibodeau, entrenador de los Bulls. “Tú no puedes reemplazar a Derrick, Jimmy o Taj individualmente, tienes que hacerlo como equipo. Van a seguir llegado los rivales y todos ellos son muy duros, por lo que vamos a necesitar mucha resistencia y mucha pelea”.
Ante tanta adversidad, dos pesos pesados dentro del equipo como Joakim Noah y Gasol han tenido que tomar las riendas para tirar del equipo. El primero aportando la energía y el espíritu de guerra en los partidos, donde en los últimos tres está promediando sus mejores números de la temporada al promediar 12.7 puntos y 11.7 rebotes por partido. Mientras que el español, el rey del doble-doble de la NBA y que ha tenido que jugar los últimos dos partidos enfermo de gripe, sigue dando la tranquilidad y serenidad que se requiere en los momentos más tensos del partido.
“Este es un momento donde todos tenemos que dar un paso adelante y luchar por cada posesión y pelota”, afirma Gasol. “Cada partido es una batalla, tenemos tres jugadores importantes lesionados, así que estoy contento con la actitud y el espíritu del equipo porque eso es lo que vamos a necesitar hasta que podamos recuperar a gente”.
La preocupación ahora es saber si los Bulls van a tener la suficiente gasolina para aguantar este ritmo tan alto de juego hasta que puedan empezar a recuperar elementos.
“Esperamos tener gasolina para seguir ganando. Vamos a ir viendo. Esta es una liga donde hay que ir partido a partido y en cada uno tienes que demostrar dónde estás”, afirma Gasol. “Vamos a ver si podemos continuar y mantener este nivel de intensidad y energía que es importante para poder ganar”.
Con la victoria ante los Wizards, los Bulls mejoraron su récord a 38-23 para mantenerse en la tercera posición de la Conferencia Este, medio juego debajo del segundo, Toronto (38-22), y medio juego arriba del cuarto, Cleveland (38-24). Por lo que la paridad y tensión es total.
Lo positivo ante tantas lesiones, es que los jugadores de la banca que normalmente no gozan de muchos minutos ahora sí lo tienen, y si lo aprovechan, su desarrollo se acelera para beneficio del equipo. Ese ha sido el caso del novato hispano-montenegrino Nikola Mirotic, la gran sensación del equipo en los últimos partidos.
Mirotic, saliendo desde la banca, ha liderado a los Bulls en anotaciones en los últimos dos partidos superando la barrera de los 20 puntos, incluyendo los 29 puntos anotados el pasado domingo ante los Clippers que fue su nueva marca personal en la NBA.
“Está haciendo un gran trabajo”, afirma Thibodeau. “Está jugando dos posiciones y está mejorando mucho. Abre la cancha, está anotando puntos y lanzando de diferentes posiciones. Su defensa ha mejorado mucho y se está entendiendo muy bien con Noah haciendo buenas jugadas”.
Los Bulls cierran su serie de siete partidos como local, donde llevan marca de 4-2, este jueves recibiendo un duro rival del Oeste como son los Oklahoma City Thunder (33-27), quienes también están en horas bajas. Octavos en la tabla, los Thunder tienen de baja a Kevin Durant, pero seguramente ya tengan de vuelta a Russell Westbrook para enfrentar a los Bulls en un partido que luce para otra gran batalla.
“Es un partido duro. Oklahoma es un equipo complicado y están ahí luchando para mantenerse en la posiciones de playoffs”, afirma Gasol. “Westbrook está jugando a un nivel altísimo, quizás al mejor de la NBA. Es un equipo peligroso. Ellos juegan este miércoles y viajan por la noche y veremos si les afecta eso porque para nosotros es un partido muy importante para seguir manteniendo nuestra posición y seguir mejorando como equipo”.