Skip to content
Author
PUBLISHED: | UPDATED:

CHICAGO – Los Chicago Bears arrancaron este miércoles su plan para reforzarse fichando al apoyador Pernell McPhee, que llega procedente de los Baltimore Ravens.

McPhee, de 26 años, 6-3, 280 libras y campeón del Super Bowl XLVII con los Ravens en 2013, ha firmado por cinco temporadas. Su incorporación se puede considerar como un gran refuerzo para la defensa ya que aunque era suplente en Baltimore, por delante suya tenía a grandes estrellas en su posición como los Pro Bowls Terrell Suggs y Elvis Dumervil que le cerraba el camino.

Según fuentes, el contrato McPhee es por $40 millones, con $16 millones garantizados. El jugador, que también puede jugar de ala defensiva, se revalorizó mucho tras la buena temporada pasada donde registró 5.7 sacks a pesar de ser suplente y puede aportar a los Bears mucha versatilidad en el nuevo sistema defensivo que está diseñando el coordinador defensivo Vic Fangio.

“Jugaré donde quiera el entrenador. Si quieren que juegue de esquinero lo haré”, dijo McPhee ayer en su presentación en Halas Hall. “Quiero traer de vuelta la tradición defensiva de los Bears”.

McPhee es el primero en llegar a los Bears pero no el último. Dos posibles refuerzos más, como el safety Antrel Rolle y el receptor Eddie Royal, están en Chicago reunidos con Ryan Pace, gerente general de los Bears, y en cualquier momento se podría anunciar sus contrataciones.

Rolle es un veterano de 10 temporadas en la NFL, tres veces Pro Bowl que ha jugado las cinco últimas temporadas en el New York Giants. Mientras que Royal tiene experiencia de ocho temporadas que ha jugado las tres últimas en los San Diego Chargers y que jugó en su temporada de novato en 2008 con los Denver Broncos que lideraba el ahora mariscal de los Bears Jay Cutler, quien ayer fue ratificado por Pace.

“Hemos estado evaluando el equipo y vamos a seguir con Jay Cutler como nuestro mariscal titular”, dijo Pace, quien además aseguró que los Bears no han pensando en ningún momento en desprenderse del jugador, muy cuestionado por parte de los aficionados.