Como rey, así se fue Cuauhtémoc Blanco.
Levantando la Copa MX, ovacionado por la afición, cargado en hombros, con lágrimas, así se retiró el pasado martes el ídolo del pueblo luego del triunfo del Puebla 4-2 sobre Guadalajara en la Final.
Así tenía que culminar el guión de Blanco tras 22 años de trayectoria, llena de luz en su mayoría y con algunos pasajes oscuros, como ocurrió casi al final del partido con el apagón en el Estadio Olímpico de la BUAP, pero en el que la luz de los teléfonos celulares le dio emotividad a la noche.
A Cuauhtémoc Blanco sólo le faltó el gol en su despedida.
Al 90′, el ’10’ del Puebla tuvo un mano a mano ante Antonio Rodríguez, pero le faltó aire y careció de fuerza en las piernas, y fue alcanzado por el zaguero Kristian Álvarez.
Como momentos de brillantez y oscuridad tuvo el Puebla, que se fue adelante aprovechando la táctica fija, primero con gol de Facundo Erpen al 7′ y después de Luis Gabriel Rey al 26′.
El Puebla pudo matar, pero Matías Alustiza perdonó. Eso lo pagaron los locales. En dos minutos, entre el 54′ y el 56′, las Chivas empataron con dos goles de Aldo de Nigris.
Pero el zaguero Kristian Álvarez le devolvió la vida al Puebla al regalarle un penal, tras una mano en el área, mismo que acertó Alustiza. El propio delantero, al 68′, le quebró la cintura a Miguel Ponce y culminó con un golazo en contragolpe.
Aldo de Nigris pudo darle esperanza a las Chivas al 86′, pero falló un penal.
El ‘Cuau’, que entró al 70′, se pasó la mañana mandando agradecimientos en redes sociales, mientras la afición, los clubes y el entorno del futbol mexicano le daban las gracias por tan brillante trayectoria.
El Puebla se coronó en la Copa tras 25 años, ganó su boleto a la Supercopa y en la que disputará con Santos un boleto a la Copa Libertadores, pero en caso de que descienda no tendrá derecho a pelear por dicho honor.
Lágrimas y risas
Blanco está seguro de que piernas estuvieron benditas.
“Lo disfruté al 100 por ciento. Le doy gracias a Dios que me haya dado estas piernas y el don de jugar futbol”, dijo el delantero durante los festejos del Puebla.
A sus 42 años, Blanco fue el gran héroe de la noche en la que La Franja conquistó otra vez la Copa MX, como lo había hecho en 1990, dos años antes del debut del ‘Cuau’.
Ya más calmado, sin lágrimas, el futbolista agradeció a la afición, ésa que jamás tuvo un abucheo para él, ésa que siempre se le rindió en todo momento, en particular con la selección mexicana.
“Estaba llorando un poquito ahí. Me voy feliz, contento, con toda la gente que siempre me apoyo en cada estadio”, dijo.
Cuauhtémoc quería retirarse en el América y dijo adiós con esa deuda, pero también esperaba que el presidente del Puebla, Jesús López Chargoy, tuviera algún detalle para él.
“No tengo resentimiento con nadie, siempre di mi máximo esfuerzo y eso es lo que vale la pena para mí. Faltó al señor Chargoy darme un reconocimiento o algo, pero así es esto”, dijo el delantero.
Ahora, Blanco no tendrá tiempo para la nostalgia porque ayer arrancaba su campaña por el Partido Socialdemócrata para gobernar Cuernavaca.
“Mañana (miércoles) tengo un reto muy importante y hay que trabajarle”, sentenció.
Acusa al dueño
Blanco se despidió de las canchas señalando a Chargoy de cambiar la alineación del Puebla, donde él iba a ser titular.
“Eso pregúntaselo a López Chargoy, que fue el que cambió toda la alineación, creo que todos los compañeros se van tristes por eso, porque a final de cuentas el ‘Profe’ Cruz hizo un cuadro y en el vestidor lo cambiaron, mis compañeros se van desilusionados con eso”, señaló Blanco.
“Eso lo platicamos en el vestidor, el ‘Profe’ Cruz tenía un cuadro y se lo cambiaron en el vestidor, pero lo mas importante es que no nos importó, siempre he dicho que hay un Dios”, añadió el ‘Cuau’.
No obstante, en entrevista con ESPN Deportes Radio este miércoles, Chargoy desmintió que él cambiara la alineación del Puebla.
-Con servicios de Agencia Reforma
