CHICAGO –
Los Cleveland Cavaliers derrotaron 94-73 a los
en el sexto partido disputado en el United Center de Chicago este jueves y avanzaron a la final de la Conferencia Este al ganar 4-2 el computo general de esta serie semifinal.
Esta es la quinta vez que los Cavs avanzan a la final de conferencia en toda su historia y la primera desde 2009. Mientras que los Bulls se quedan en la orilla y colocan su marca en los sextos partidos en la historia de la franquicia en 13-13 y caen eliminados a manos de LeBron James por cuarta ocasión en seis temporadas.
Una vez en esta serie, el equipo que ganó el rebote fue el que ganó el partido. En este sexto partido los Cavs superaron ampliamente en esa faceta por 53-32 a los Bulls para conseguir la mayor victoria de esta serie.
Los triples fueron otro factor crucial en la victoria de los Cavs, que acribillaron con 12 triples de 27 intentos (44.4%) a los Bulls, que intentaron seguirle el paso y se estrellaron al sumar sólo cuatro de 20 intentos (20%).
Los Bulls pudieron recuperar para este partido al ala-pívot español
, quien se había perdido los partidos anteriores con una contractura muscular. Pero el español, muy mermado, sólo pudo sumar 8 puntos (3-8), todos ellos en el primer cuarto, y 5 rebotes en 23 minutos de juego.
“Ellos han jugando mejor que nosotros y han ganado la serie”, dijo Gasol. “Se merecen avanzar. Desafortunadamente me perdí los dos partidos anteriores y no pude ayudar a mi equipo. Hoy intenté hacerlo lo mejor posible pero no ha sido suficiente”.
“Estoy feliz con esta temporada, aunque no con este final”, añade. “La temporada ha sido extremadamente positiva. El equipo ha mostrado un gran potencial y mucha calidad, pero tenemos que encontrar más consistencia”.
Los Bulls sólo pudieron aguantar el paso de los Cavs durante el primer cuarto y medio, momento en que Nikola Mirotic cometió una falta flagrante a Iman Shumpert con el marcador 40-41 favorable al equipo de Cleveland a falta de 5:19 minutos. A partir de ahí los Cavs se encendieron y cerraron el cuarto con un parcial de 4-17 para romper el partido y llegar al descanso con una amplia ventaja de 44-58. Una ventaja que los Bulls ya no pudieron remontar en la segunda mitad, sino todo lo contrario, la ampliaron hasta 27 puntos (66-93) a finales del último cuarto.
En esta ocasión la gran figura de la victoria de los Cavs no fue su estrella LeBron James, autor de sólo 9 puntos en toda la segunda mitad y cuatro pérdidas de balón. No obstante el ‘Rey’ Lebron puso su sello, fue importante, jugó casi todo el partido y terminó casi con un triple doble de 15 puntos (7-23), incluyendo 0-4 en triples, 9 rebotes y 11 asistencias en 41 minutos de juego.
El verdadero verdugo de los Bulls fue el base australiano suplente de los Cavs, Matthew Dellavedova, que saliendo de la banca terminó siendo el máximo anotador de su equipo al sumar 19 puntos (7-11), incluyendo 3-6 en triples. Mientras que el ala-pívot Tristan Thompson fue también parte importante con un doble-doble de 13 puntos y 17 rebotes. Mientras que Shumpert terminó con 13 puntos y 7 rebotes y JR Smith con 12 puntos y 8 rebotes.
“El poder del equipo superó todas las barreras”, dijo el entrenador de los Cavs, David Blatt. “Enfrentamos muchas adversidades, pero el equipo creyó en sí mismo y salió adelante”.
Los Bulls, que arrancaron bien el partido donde llegaron a tener una máxima ventaja de 7 puntos en el primer cuarto, fueron desinflándose hasta quedarse sin gas ni recursos mediados el segundo cuarto, siendo ya un equipo completamente impotente, sin alma y a merced del rival en la segunda mitad.
Jimmy Butler con 20 puntos y Derrick Rose con 14 puntos y 6 asistencias fueron los más destacados del equipo de Tom Thibodeau, quien podría haber dirigido su último partido al frente de los Bulls. Y es que en Chicago se habla ya de una revolución del equipo y el fin de un proyecto. Veremos.
