BUENOS AIRES (AP) – Un fiscal investigaba el lunes las causas concretas de la muerte de un futbolista de una liga del interior, que un día antes, durante un partido, recibió primero un rodillazo y luego un golpe en el rostro.
La muerte de Micael Favre, de 24 años y quien defendía a San Jorge de Villa Elisa, se produjo durante un partido ante Defensores, por la liga de fútbol aficionado del departamento de Colón, en la provincia de Entre Ríos.
El fiscal Sebastián Blanc esperaba declaraciones de testigos y analizaba imágenes de la televisión, en las cuales se ve que Favre, al disputar una pelota, recibió un rodillazo en el rostro que lo hizo caer. Al levantarse, otro adversario le propinó un golpe de puño.
“Fue una jugada desafortunada”, dijo el técnico de San Jorge Daniel Noir al canal de noticias TN. “Se perdió una vida joven, con mucho futuro, era un gran jugador de fútbol y una gran persona”.
Después de caer por segunda vez, Favre fue trasladado en ambulancia al hospital local, cercano a la cancha donde se estaba disputando el encuentro, pero los médicos no pudieron evitar su muerte.
La Asociación del Fútbol Argtentino, a través de su sitio oficial, expresó sus condolencias por el fallecimiento de Favre.
