CHICAGO –
El orgullo nacional contra cartera internacional, esa es la final de la
. Las
regresan a disputar un título luego de casi 11 años, vienen de ganar la Copa MX y buscan un histórico doblete en esta sonada época Vergara/Almeyda.
, que sigue marcando su era con Ricardo Ferretti, busca el bicampeonato para subirse a la vitrina junto a Pumas y León, como únicos equipos en lograrlo en los torneos sacabilletes cortos.
Una final con similitudes y disparidades. Chivas arrancó el torneo jugando un fútbol creativo, alegre y vistoso, saboreando las mieles de la cima de la tabla general y regalándonos un deleite futbolero las primeras 10 jornadas, hasta que llegaron las lesiones, abarrotando el hospital de Verde Valle y tambalearon lo que venía haciendo el rebaño del pastor Matías Almeyda.
La acumulación de puntos en el CL 2017 durante esas primeras fechas, el paso arrollador y campeonar en la Copa MX, y a decir del mismo ‘Pelado’, haber aprendido a jugar las también sacabilletes liguillas del balompié azteca tienen a Chivas en esta final, que a decir de muchos, están obligados a ganar, que según Jorge Vergara van a ganar y que según Almeyda quiere ganar, pero se topó con el actual campeón.
Por su parte Tigres, que llegó de panzazo a la fiesta grande después de un rocoso inicio de torneo, con sus figuras despistadas y un Gignac más desabrido que un croissant sin mantequilla, tuvo a bien contar con el colmillo retorcido del ‘Bigotón’ (el que si sabe ganar títulos). ‘Tuca’ Ferretti se ha caracterizado por ser explosivo, de mecha muy corta ante las adversidades, pero también por su basta experiencia que le brinda la tranquilidad de saber esperar los resultados, sabe inyectar paciencia en sus jugadores y ahora no fue de otra manera. Al contrario del Guadalajara, cerró fuerte el torneo, anotando muchos goles y aprovechando el despertar de su gigante de la Ciudad Luz.
La disparidad de nómina entre ambos planteles tiene a más de uno pensando que los regios van a aplastar a los tapatíos. Si bien Tigres es el equipo más rico de México, Chivas no es el más pobre tampoco. Vergara prometió tener a los mejores jugadores del mundo cuando adquirió al equipo y ahora tiene al mejor cuadro desde que llegó a la máxima silla rojiblanca. También tiene al mejor cuerpo técnico, ha dejado trabajar al entrenador argentino, ha desaparecido ante los medios y cuando aparece, sigue enviando mensajes positivos.
Por ahora la desventaja de Chivas se plasma en las lesiones de Jair, Fierro, Salcido, Brizuela, Zaldivar y la sequía de gol de Alan Pulido, pero la falta de gol se contrarresta con la seguridad de Cota bajo los tres palos, el regreso de Pizarro y fortaleza del medio campo con Pineda y Sánchez.
Auguro una final de ida y vuelta, vertiginosa, de alarido, de orgullo contra cartera y espero ver una patada al trasero de la 10-8.
