Skip to content
Author
PUBLISHED: | UPDATED:

SEÚL –

Corea del Norte celebró el domingo una masiva ceremonia en Pyongyang para conmemorar el primer aniversario de la muerte de Kim Jong-il, fallecido el 17 de diciembre de 2011 y a quien sucedió su hijo menor, Kim Jong-un.

Según la agencia estatal norcoreana KCNA, en el “servicio memorial nacional” celebrado en Pyongyang estuvo presente el joven Kim, que en el último año se ha consolidado como nuevo líder de Corea del Norte dando continuidad a las políticas de su padre.

La agencia surcoreana Yonhap indicó que la televisión del país vecino retransmitió en directo el acto, que tuvo lugar en un estadio de la capital norcoreana en presencia de miles de militares.

Durante el evento, que duró 70 minutos, Kim Yong-nam, jefe del Presidium de la Asamblea Popular Suprema y considerado número dos del régimen norcoreano, alabó los “logros” del fallecido Kim Jong-il y arremetió contra el “imperialismo de EEUU”.

Kim Jong-il “hizo de la República Democrática Popular de Corea un poder militar mundial y un Estado con armas nucleares legítimas”, dijo en unas declaraciones recogidas por KCNA.

Aunque se desconocen los actos que se llevarán a cabo el lunes, día del aniversario de la muerte de Kim, los medios surcoreanos apuntan a que posiblemente Corea del Norte le rendirá homenaje en el Palacio Memorial de Kumsusan, donde descansan sus restos.

La ceremonia fue a dos días de otra multitudinaria celebración en Pyongyang por el exitoso lanzamiento, el 12 de diciembre, de un cohete de largo alcance que consiguió poner en órbita por primera vez un satélite norcoreano.

La operación recibió duras críticas de un amplio número de países, que la consideraron un ensayo encubierto de misiles balísticos que violaría dos resoluciones de la ONU.

Según el régimen norcoreano, Kim Jong-il falleció el 17 de diciembre de 2011 de un ataque cardíaco durante uno de sus habituales viajes de inspección por el país que gobernó durante 17 años.

En los meses siguientes, su hijo Kim Jong-un, que se cree tiene 28 o 29 años, se afianzó en el poder, en una transición suave durante la que acaparó los principales títulos del país, incluidos los de comandante supremo del Ejército y presidente de la poderosa Comisión Nacional de Defensa.