Skip to content
Author
PUBLISHED: | UPDATED:

Por Paula Bustamante

SANFORD, FLORIDA –

Varias protestas estallaron en la madrugada del domingo en diferentes ciudades de Estados Unidos, luego de que el sábado un jurado de Florida declarara no culpable a un vigilante barrial por el asesinato de un joven negro desarmado.

El juicio sacudió a la nación, entre quienes creen que George Zimmerman –cuyo padre es blanco y su madre peruana– actuó en legítima defensa y quienes piensan que éste consideró un criminal a Trayvon Martin solamente porque era negro.

Protestas espontáneas se registraron luego del veredicto en San Francisco, Filadelfia, Chicago, Washington y Atlanta.

En Oakland, California, los manifestantes rompieron vidrieras de negocios y pintaron automóviles con spray, pero la mayoría de las protestas fueron pacíficas y vigiladas estrechamente por la policía.

El veredicto fue aplaudido por defensores de las armas y considerado frustrante por quienes ven este caso como un acto injusto y racista.

Después de 16 horas de deliberaciones, las seis mujeres miembro del jurado consideraron no culpable a Zimmerman, que fue acusado de asesinato en segundo grado de Martin, un joven de 17 años que caminaba una noche lluviosa el 26 de febrero de 2012 a la casa donde se encontraba su padre de visita.

Ante el temor a que se produjeran protestas y episodios violentos tras conocerse el veredicto, activistas y líderes de la comunidad habían llamado a la calma. La policía fue desplegada en Sanford y cientos de personas se reunieron fuera del tribunal de manera pacífica.

“Obviamente estamos exultantes con los resultados. George Zimmerman nunca fue culpable de nada salvo de protegerse a sí mismo en defensa propia”, dijo su abogado Mark O’Mara.

No obstante, Don West, el otro abogado de Zimmerman reconoció que este caso había sido una “desgracia” por la muerte del adolescente y por toda la polémica que levantó en el país.

“Dios nos bendijo a mí y a Sybrina con Tray, e incluso en su muerte sé que mi bebé está orgulloso de la lucha que, junto a todos ustedes, dimos”, dijo un emocionado tuit del padre de la víctima, Tracy Martin, poco después de conocer el veredicto.

Tanto él como la madre de Trayvon Martin, Sybrina Fulton, dijeron tener “el corazón roto”, tras agradecer a todos aquellos que seguirán luchando junto a ellos para que muertes como éstas “no se repitan”.

Por su parte, el hermano mayor de Zimmerman, Robert, también escribió un mensaje en Twitter: “Mensaje del Padre: ‘Toda nuestra familia está aliviada’. Hoy… Estoy orgulloso de ser estadounidense. ¡Dios bendiga América! ¡Gracias por sus oraciones!”.

El caso estuvo teñido de acusaciones de racismo desde el principio, provocó protestas por los derechos civiles en varias ciudades de EEUU y dividió al país entre quienes vieron en el crimen un caso de defensa personal amparado en una ley de armas de Florida, y otros que lo percibieron como un reflejo de discriminación racial.

Cientos de personas, familias, estudiantes de todas las razas, pastores y activistas negros se acercaron a las puertas del Palacio de Justicia en Sanford para clamar “justicia por Trayvon Martin”, mientras otros residentes del centro de Florida, en su mayoría blancos, celebraban la inocencia de George Zimmerman.

“Este es el fin de nuestro sistema de justicia. La justicia no es igual para todos”, dijo Ashton Summer, un joven de origen puertorriqueño de 20 años, indignado con el veredicto.

El fiscal Bernie de la Rionda, jefe del equipo acusador, se dijo “decepcionado con el veredicto” pero lo aceptó y como los demás fiscales y abogados de Zimmerman se unió a los llamados a respetar en paz esta decisión.

La fiscal del estado, Angela Corey, apuntó que “hicieron lo mejor” para mostrar al jurado todas las evidencias de un caso que “merecía ser analizado” y aunque lamentó el resultado celebró la fortaleza del sistema de justicia.

Pastores de iglesias de la comunidad blanca y negra en el centro de Florida han trabajado con la fiscalía, la corte y la policía para llevar desde hace meses un mensaje de paz a sus respectivas comunidades para que respetaran el veredicto.

La muerte de Martin y la falta de arresto inmediato de Zimmerman por parte de la policía provocaron el año pasado masivas protestas en varias ciudades del país.