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Ante la inminente falta de aprobación de una reforma migratoria, el representante federal Luis Gutiérrez reiteró el martes lo que espera del presidente Barack Obama.

Gutiérrez dijo que quiere un alto a las deportaciones; Acción Diferida o DACA para familiares inmediatos de soñadores y ciudadanos; y la reunificación (parole in place) para quienes estén pagando algún ‘castigo’ fuera de Estados Unidos, entre otras medidas.

“Las deportaciones han tenido efectos devastadores en nuestros vecindarios y el proceso de sanación puede comenzar si Obama toma medidas agresivas”, y ello podría ocurrir tan pronto como unas semanas, comentó Gutiérrez.

El congresista federal añadió que la crisis de los niños no acompañados en la frontera no deberían causar ningún retraso en la orden ejecutiva del Presidente respecto a la reforma migratoria.

“Son dos cosas completamente separadas”, dijo Gutiérrez, “la crisis en la frontera es mucho más complicada, requiere que reformemos el sistema migratorio, pero también requiere que los gobiernos de Centroamérica tomen cartas en el asunto”.

El representante federal indicó lo anterior después de escuchar los testimonios de familias afectadas por procesos de deportación en las oficinas de la Coalición de Illinois pro Derechos de Inmigrantes y Refugiados (ICIRR) en Chicago.

Entre ellos estaban Josefa González y sus dos hijos, quienes entre lágrimas contaron que tienen esperanza que las acciones que vaya a tomar el presidente les regrese a Wilson Gómez, el padre de familia detenido por Inmigración hace 10 meses.

Otro afectado es Agustín Corona, quién dijo que tiene una fecha de salida voluntaria el 31 de julio, “mi vida y mi familia está aquí”, dijo Corona, quien recordó que fue arrestado dos días después de haber realizado el sueño de comprar su primer casa.

Las medidas mencionadas por Gutiérrez son sólo algunas de las recomendaciones que el Caucus Congresional Hispano le hizo a Jeh Johnson, secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), quien deberá entregar un informe al presidente Obama en el que le explicará cuáles son los cambios, que bajo la ley puede hacer su Departamento para mejorar el funcionamiento del sistema migratorio.

En el documento, el Caucus propone extender DACA a los indocumentados que hubieran sido elegibles para regularizar su estatus migratorio bajo la propuesta de reforma migratoria aprobada por el Senado el año pasado; también propone establecer la reunificación ‘parole in place’ y explica que ello beneficiaría a diversos grupos de diferentes maneras; mientras que a algunos los protegería de la deportación, a otros les permitiría cancelar los castigos que los mantiene fuera de Estados Unidos y les permitiría continúan sus procesos para obtener la residencia permanente en Estados Unidos; también, propone permitir a beneficiarios de DACA, TPS, asilo o refugiados inscribirse a las fuerzas armadas.

“El presidente Obama tiene la autoridad legal y la obligación moral de terminar con la crisis de las deportaciones”, comentó Lawrence Benito, CEO de ICIRR. “Ahora que el presidente ha manifestado su voluntad de actuar, debe tomar medidas inmediatas y hacer todo lo que esté en su poder para hacer frente a esta crisis”, agregó.

“Las dos veces que apoyamos sus campañas políticas nos prometió una reforma migratoria, ya vimos que no hubo la voluntad política de invertir en la reforma, ahora queremos que el presidente tome responsabilidad de sus actos y pare las deportaciones, pare la separación de familias”, comentó José Luis Gutiérrez, director asociado de la Alianza Nacional de Comunidades Latinoamericanas y Caribeñas (NALACC)