CHICAGO
– Al tiempo que organizaciones denuncian las redadas que el gobierno federal inició con 2016, también se movilizan para informar a indocumentados sobre sus derechos ante una redada, y planean protestar contra legisladores federales.
Tania Unzueta, organizadora del grupo Comunidades Organizadas Contra las Deportaciones (OCAD), calificó dichas redadas como “terribles”.
Unzueta señaló que OCAD y otras organizaciones que trabajan por los derechos de los inmigrantes, denunciarán el martes las redadas y deportaciones frente a las oficinas de ICE en Chicago; pedirán al director del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (
ICE
) en Chicago que no realice las redadas en su jurisdicción, y anunciarán una serie de talleres para informar a los inmigrantes qué hacer en caso de que agentes de ICE toquen a su puerta.
Unzueta indicó que también van a salir a tocar puertas para informar a la comunidad inmigrante sobre sus derechos en el barrio de Albany Park, en donde un gran número de familias centroamericanas han llegado.
El lunes, Jeh Johnson, secretario del Departamento de Seguridad Nacional (
DHS
), confirmó que el pasado fin de semana “ICE realizó operativos concertados a nivel nacional para detener y regresar a adultos con niños que entraron ilegalmente al país”.
“Esto no debería ser una sorpresa. He dicho por meses públicamente que los individuos que constituyen una prioridad para ICE, incluidas las familias y los
niños no acompañados
, serán deportados”, declaró Johnson.
Según el secretario de DHS, como parte de las redadas “121 individuos fueron detenidos, principalmente de Georgia, Texas y Carolina del Norte, y ahora están en proceso de ser repatriados. Para efectos de remoción, la mayoría de las familias fueron transportadas, primero a un centro familiar de ICE, para luego ser procesadas antes de que se les expidan los documentos de viaje y sean embarcadas en vuelos de regreso a sus países de origen”.
El funcionario indicó que el enfoque de las redadas son los adultos y niños, quienes cruzaron ilegalmente la frontera después del 1 de mayo de 2014; aquellos que tienen órdenes finales de deportación; y quienes han agotado sus recursos legales apropiados, y por ley no tienen apelaciones o reclamos pendientes de asilo u otro alivio humanitario.
En Waukegan, la comunidad se movilizó. Miembros de LULAC del Condado de Lake se reunieron con familias hondureñas el domingo para “educarlas sobre sus derechos legales” si son detenidas por agentes de inmigración.
Julie Contreras, miembro de esa organización, indicó que “los afectados son seres humanos que huyen de la violencia, las pandillas y la corrupción, y ahora son cazados como animales por el gobierno federal”.
Por lo pronto, Unzueta recomendó a miembros de la comunidad inmigrante no abrir si los agentes de Inmigración llaman a su puerta. “Se supone que para arrestar a alguien, los agentes deben llevar una orden de cateo o arresto”, y si no lo llevan no pueden entrar por la fuerza, dijo.
Unzueta indicó que las personas interesadas en los talleres informativos “conozca sus derechos” pueden asistir al Centro Autónomo de Albany Park, 3460 W. Lawrence Ave., los sábados 9 y 16 de enero de 11 am a 2 pm, en donde aprenderán qué precauciones tomar en caso de una redada y luego abogados de inmigración evaluarán casos individuales en una clínica legal.
En Chicago miembros de la Misión Fe, Vida y Esperanza anunciaron, tras protestar frente al Centro de Detención en Broadview el 31 de diciembre y una vigilia el domingo 3 de enero en esa misión, que protestarán esta semana frente a la oficinas de los representantes federales Luis Gutiérrez y Daniel Lipinski.
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