WAUKEGAN- A menos de una semana de la elección municipal dos de los aspirantes a concejal por el distrito 9 de Waukegan hablan de sus plataformas de campaña y explican porqué son los mejores para ocupar el cargo que deja vacante Rafael Rivera.
Waukegan, un poblado con unos 88,856 habitantes, de los cuales los latinos son aproximadamente el 53.4%, según el Censo de 2010, elegirá a su concejo municipal en las Elecciones del 7 de abril.
Las preocupaciones e intereses de los residentes giran en torno a seguridad pública, educación, impuestos a la propiedad y desarrollo económico; asuntos sobre los cuales los aspirantes a concejal trabajan estratégias.
En el noveno distrito “la comunidad es muy diversa y existe mucha desigualdad”, comentó Jacqueline Herrera Girón, candidata demócrata a concejal, quien mencionó que en ese distrito hay un área que incluye residencias de millones de dólares, mientras en otra las viviendas están valoradas hasta en unos $55,000.
Rivera, se retira luego de haber representado al distrito por los últimos cuatro términos, y en la contienda para sustituirlo se encuentran Herrera Girón y los candidatos independientes Anthony Soler y Ann Taylor.
Herrera Girón es abogada de inmigración y presidenta de la Junta de las Bibliotecas Públicas de Waukegan, ha trabajado para organizaciones sin ánimo de lucro y como maestra de enseñanza elemental en escuelas públicas.
“Encontraré la forma de traer más dinero y recursos para realizar proyectos”, defendió Herrera.
Por su lado, Soler, veterano de la Marina de Estados Unidos, teniente del Departamento de Bomberos y paramédico, se considera la mejor opción “he trabajado y servido a la gente durante 20 años y siento la necesidad de seguir ayudándoles como futuro concejal”, argumentó.
Taylor, propietaria -junto con su esposo- de una empresa de consultoría, no estuvo disponible para ser entrevistada por diario Hoy. Sin embargo, en declaraciones al Chicago Tribune dijo que “ahora más que nunca hace falta traer negocios a la ciudad y se necesita (un candidato) que conozca de presupuestos y que sea capaz de tomar decisiones difíciles”, ello luego de que la ciudad reportó un déficit presupuestario de $1.2 millones.
Tanto Herrera como Soler comparten la idea de que el incremento de impuestos a la propiedad no es conveniente. Soler comparó Waukegan y su forma de recaudar impuestos con base en el aumento de impuestos a la propiedad, mientras que ciudades vecinas como Gurnee recaudan la mayoría de sus ingresos por concepto de impuestos a la venta.
Es por eso que “debemos fomentar la creación de negocios, explicó Soler.
Herrera añadió que quiere buscar maneras de atraer negocios, sobre todo en la zona de Fountain Square. “Esa área tenía un centro comercial que perdió muchos negocios luego de que Gurnee abrió su centro comercial “Gurnee Mills”, añadió Herrera.
Además, Soler mostró su apoyo al establecimiento de un casino en la ciudad para aumentar la recaudación de impuestos y la atracción turística.
Tanto Herrera como Soler coincidieron en la necesidad de más oficiales de policía en la ciudad. Herrera favorece el programa de vigilancia comunitaria “Neighborhood Watch”, que según explicó, dejó de llevarse a cabo por falta de fondos. “Era un programa que funcionaba, creaba confianza por parte de los vecinos hacia la Policía. Voy a buscar la manera de restablecerlo”, mencionó la candidata.
Por otro lado, Herrera mostró interés en mejorar el sistema educativo mediante la colaboración del Concilio Municipal con la Junta de Educación. “Creo que debería haber una relación entre las escuelas y la municipalidad para mejorar el nivel académico. Para que haya más estudiantes graduados y preparados para poder trabajar y ofrecer su mano de obra a esos negocios y empresas que quiero traer a la ciudad”, puntualizó Herrera.
Según greatschools.org, las escuelas del Distrito 60 están valuadas entre el 1 y 6 sobre un puntaje de 10. La mala calidad de la enseñanza afecta a la comunidad de menores recursos del distrito, en su mayoría latinos, comentaron residentes del área, y agregaron que los estudiantes del segmento más pudiente del distrito, por lo general acuden a las escuelas públicas de Gurnee y Libertyville, las cuales tienen puntuaciones sobresalientes.
Cayetano García es residente y votante del Distrito 9, y se considera afectado por la calidad de la educación pública en la ciudad.
“Prefiero llevar a mi hija a una escuela privada católica y saber que va a tener buen nivel aunque tenga que pagar”, mencionó García. “Llevo 20 años en esta ciudad y la calidad de la enseñanza no mejora a pesar que los impuestos siguen incrementándose”, agregó.