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Hace unos días asistí a una protesta contra los recortes propuestos por Bruce Rauner, gobernador de Illinois.

Decenas de jóvenes, adultos y niños coreaban las clásicas arengas; otros más portaban carteles con mensajes poco halagadores para Rauner.

Pude ver la tristeza, enojo y ansiedad que da el saber que no habrá dinero para apoyar a las organizaciones que a su vez protegen y sirven a los más necesitados.

De ser autorizados los recortes por la Legislatura estatal, una gran cantidad de latinos, afroamericanos y otras minorías se verán afectados. El presupuesto actual termina el 30 de junio.

Los recortes presupuestales afectaría a agencias y organizaciones en general por 2,000 millones de dólares, incluidos la educación universitaria y los servicios de salud. En al ámbito migratorio se eliminarían casi 7 millones de dólares que el estado dedicaba a servicios de consejería, talleres de ciudadanía, interpretación y traducción.

Cabe mencionar que esos recursos además contribuyen al funcionamiento de la Oficina Nuevos Americanos del estado, la cual trabaja con los inmigrantes recién llegados y aquellos en condiciones de obtener la ciudadanía y que no está claro si seguirá en existencia o no. No es una buena señal ni tampoco un mensaje pro inmigrante, todo lo contrario.

Ahora bien, de acuerdo a un reporte de la Comisión de la Familia Latina de Illinois, los latinos representamos el grupo minoritario -incluidos los inmigrantes- más grande de Illinois con el 16 por ciento de la población total. De 2000 a la fecha tuvimos un crecimiento del 33 por ciento. Más de 2 millones de latinos que vivimos, trabajamos, abrimos negocios, nos vamos de compras y cuidamos a nuestras familias aquí.

Y qué decir de nuestras contribuciones a Illinois en forma de impuestos y el poder de consumo. Por si fuera poco, nuestra presencia latina ya se dejó sentir en las elecciones municipales de Chicago y en términos de candidatos estoy seguro que habrá a muchos más en poco tiempo, los cuales serán tomados más en cuenta.

Entonces, ¿por qué el gobernador Rauner no nos ve? Hay decenas de editoriales, noticias y entrevistas recientes donde se proyecta como amigo de los inmigrantes, pero todo eso al parecer se acabó.

Grupos pro inmigrantes y sin fines de lucro en áreas como salud, educación y otros han protestado tanto Springfield como en Chicago para hacerle llegar el mensaje de desapruebo. Pero no hay respuestas. No hay diálogo.

¿Cuál es el mensaje de Rauner? Sus decisiones poco a poco nos transportan décadas atrás a un Illinois donde no hay cabida o poco apoyo para los recién llegados.

Tal parece que las decisiones de Rauner se encaminan más y más a la plataforma republicana del estado con respecto a los inmigrantes, nada halagüeño, por cierto. La pueden verificar

aquí

Muy pronto el gobernador deberá establecer un diálogo sincero con la comunidad latina e inmigrante sobre los planes que tiene para nosotros y esperemos que no use el escudo de siempre -la elección como vicegobernadora de Evelyn Sanguinetti- para justificar su apoyo a nuestra comunidad. Por cierto, Sanguinetti dijo que iba a gobernar con Rauner, que sería la voz de nuestra comunidad, pero hasta ahora ha sido una voz discreta… o muy bajita.

El presupuesto que Rauner presentó a la Asamblea Legislativa en febrero tiene un déficit de 5,000 millones de dólares, que se suman a otros 1,500 millones de cuentas impagadas que heredó por décadas de mal manejo administrativo en Illinois. Puede haber otras soluciones, una con justa dimensión y con balance equitativo de los contribuyentes y no a costa de los más vulnerables de Illinois.

Es importante exigir a nuestros Representantes y Senadores estatales -y sobre todo los de origen latino- que actúen con responsabilidad y que piensen en defender a quienes votaron por ellos. Muchos han expresado su preocupación, pero no es suficiente. Hay quienes comentan que muchos de los Legisladores se sentirán amenazados si no van con la línea de Rauner y temen a que él mismo ponga con su dinero a candidatos en su contra. No lo dudo, es válido y sólo hay que voltear a ver lo que pasó en Chicago con Rahm Emanuel.

Independiente del resultado, en las elecciones recientes tanto de gobernador como de alcalde la comunidad latina e inmigrante demostraron el poder de la organización cuando se quiere. Se ha declarado la insatisfacción de muchos votantes con el trabajo actual de funcionarios electos. Nos hemos dado cuenta de la importancia de participar en el proceso electoral. Pero la comunidad aún requiere una vigilancia constante en las decisiones de nuestros gobernantes. Si queremos una sociedad más justa en Illinois no podemos nada más quejarnos del estado de las cosas.

-Javier Salas es exasesor del gobernador de Illinois. Sígalo en Twitter en @javiersalas