Por Benjamin Kang Lim y Ben Blanchard
PEKIN, 21 feb (Reuters) – El ex funcionario chino ca -do en
desgracia Bo Xilai se est ¡ rehusando a cooperar con la
investigaci ‘n del Gobierno sobre acusaciones en su contra, ha
realizado huelgas de hambre e incluso en una oportunidad tuvo
que ser llevado a un hospital, dijeron fuentes con conocimiento
del caso.
Casi un a +/-o despu (c)s de que Bo fuera destituido en medio de
una serie de acusaciones de corrupci ‘n, abuso de poder y
participaci ‘n en un asesinato, el Gobierno no ha ofrecido una
fecha para el momento en el que ex pol -tico deber ¡ comparecer en
un juicio, y ni siquiera ha anunciado cargos formales.
Bo fue removido de su cargo como jefe del Partido Comunista
de la ciudad suroccidental de Chongqing el a +/-o pasado despu (c)s de
que su esposa fuera acusada y procesada por el asesinato del
empresario brit ¡nico Neil Heywood.
Antes de eso, se esperaba que Bo, de 63 a +/-os, fuera
ascendido al c -rculo m ¡s estrecho de poder del Partido
Comunista. Su ca -da se produjo luego de que su jefe de la
polic -a, Wang Lijun, escapara brevemente y tomara refugio en el
consulado estadounidense en febrero pasado y acusara a la esposa
del poderoso funcionario, Gu Kailai, de envenenar a Heywood.
Gu y Wang fueron condenados por el asesinato y enviados a
prisi ‘n.
No se han presentado cargos criminales contra Bo pero el
Partido Comunista lo acus ‘ de corrupci ‘n y de manipular la ley
para ocultar el asesinato de Heywood, seg ?n comentarios
publicados por la agencia de noticias oficial Xinhua.
Dos fuentes independientes vinculadas a la familia dijeron
que el juicio de Bo probablemente ser ¡ postergado hasta despu (c)s
de una sesi ‘n anual del Parlamento y su principal entidad
asesora que se realizar ¡ en marzo, dado que el ex pol -tico no
presenta condiciones f -sicas adecuadas.
“El estuvo en huelga de hambre dos veces y se le oblig ‘ a
comer”, dijo a Reuters una fuente, que pidi ‘ permanecer en el
anonimato debido a la sensibilidad del caso. No estaba claro por
cu ¡nto tiempo se prolong ‘ la huelga de hambre.
“No fue torturado, pero se enferm ‘ y fue llevado a un
hospital en Pek -n para ser tratado”, dijo la fuente, que declin ‘
brindar detalles sobre la actual condici ‘n y paradero de Bo, que
han sido mantenidos bajo secreto tras su destituci ‘n.
El Partido Comunista, obsesionado con la estabilidad, est ¡
resuelto a evitar que otro acontecimiento pol -tico -incluido el
juicio de Bo- interrumpa el proceso final de la transici ‘n de
poder en China, en la que el vicepresidente Xi Jinping se
convertir ¡ en m ¡ximo l -der.
Xi, que asumi ‘ el liderazgo del partido y de las fuerzas
armadas en noviembre, tomar ¡ el cargo de jefe de Estado de manos
de Hu Jintao durante la sesi ‘n anual del Parlamento, que
comienza el 5 de marzo.
Consciente del enojo p ?blico por una seguidilla de
esc ¡ndalos que involucran a funcionarios, Xi ha hecho de la
lucha contra la corrupci ‘n uno de sus principales temas, y ha
dicho que nadie, sin importar su puesto, est ¡ por el encima de
la ley.
El vicepresidente indic ‘ que la supervivencia del Partido
Comunista corre riesgo si el pa -s no frena la corrupci ‘n.
(Editado en espa +/-ol por Marion Giraldo)