BOSTON (AP) – Un bombero acudió a apagar un incendio en la casa de su madre en un suburbio de Boston y se llevó un susto fuerte cuando escuchó un reporte radial de que alguien había saltado de la ventana del segundo piso de la casa.
Steve Perry dijo que “ya pensaba lo peor” cuando llegó a la casa en Dorchester, pero al llegar vio a su madre sana y salva, sentada en la acera frente a la casa. La mujer había saltado del segundo piso pero fue atajada por un obrero que trabajaba cerca.
El obrero, Edwin Julia, estaba trabajando en una casa vecina cuando vio el humo saliendo de la vivienda y escuchó los gritos de la Regina Atwater-Robinson, de 62 años.
Atwater-Robinson tildó a Julia de “mi ángel protector”.
Perry, de 43 años y quien lleva 17 con el departamento de bomberos, lloró de emoción al ver que su madre estaba bien.
El incendio fue atribuido a un cortocircuito.
