Por Francesco Canepa
LONDRES, 30 mayo (Reuters) – Los inversores que enfrentan
m -nimos hist ‘ricos en los rendimientos de bonos est ¡n buscando
rendimientos a trav (c)s de derivados complejos, los instrumentos
en la ra -z de la crisis financiera mundial del 2008, que pueden
generar grandes agujeros en las hojas de balance si se arruinan.
El est -mulo monetario de los bancos centrales ha reducido
los rendimientos de los bonos soberanos y corporativos y
enviados las acciones a m ¡ximos en varios a +/-os, lo que a su vez
ha animado a los inversores a comprar productos estructurados
que unen derivados con acciones o bonos para aumentar los
rendimientos.
“El entorno de bajos tipos de inter (c)s est ¡ llevando a los
clientes a buscar el rendimiento”, dijo S (c)bastien Gyger, jefe de
gesti ‘n de la cartera de clientes privados en Lombard Odier.
“El volumen de productos estructurados ha sido alto y ha
aumentado, sobre todo desde principios de a +/-o”, agreg ‘.
Sus clientes han estado haciendo apuestas apalancadas a tres
meses en algunas acciones l -deres suizas a trav (c)s de productos
estructurados que ofrecen protecci ‘n limitada sobre el capital
invertido.
Los productos estructurados populares se basan
principalmente en acciones, deuda corporativa o bonos soberanos,
haci (c)ndolos m ¡s transparentes que los que desencadenaron la
crisis del 2008, que inclu -an hipotecas estadounidenses de baja
calidad, pero estos productos a ?n presentan riesgos.
Por lo general son acuerdos alcanzados directamente por un
banco y un inversor “sobre el mes ‘n” (OTC, por su sigla en
ingl (c)s), no a trav (c)s de un intercambio.
Su naturaleza a la medida y t (c)rminos complejos implica que
son mucho m ¡s dif -ciles de descargar que una acci ‘n, bono o
unidad en un fondo negociable en el mercado (ETF, por su sigla
en ingl (c)s) si empiezan a generar p (c)rdidas.
Tambi (c)n exponen a sus propietarios al riesgo de impago por
parte del banco que los crea, a diferencia de las acciones y los
bonos.
Por estas razones, los inversores que compran los productos
estructurados y los bancos que los emiten ser ¡n vulnerables a la
volatilidad que podr -a surgir cuando los bancos centrales
finalmente abandonen su pol -tica ultraflexible.
“Cuando el pr ‘ximo brote de volatilidad llegue, con el
cambio en las tasas de inter (c)s, entonces todo lo que necesita es
que un banco quiebre, y de repente est ¡s de vuelta en una
crisis”, dijo Adrian Blundell-Wignall, director adjunto del
directorio para asuntos financieros y empresariales de la
Organizaci ‘n para la Cooperaci ‘n y el Desarrollo Econ ‘mico
(OCDE).
(Reporte adicional de Toni Vorobyova. Editado en espa +/-ol por
Carlos Aliaga)