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  • Un plato de pollo en salsa de mole servido con...

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    Un plato de pollo en salsa de mole servido con arroz blanco y plátanos fritos, preparado por estudiantes, es servido en la Posada de los Milagros B&B, en Oaxaca, México, el 15 de marzo de 2011. (AP Foto/Luis Alberto Cruz, Archivo)

  • Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez...

    AP/Fernando Llano

    Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez da los toques finales a un mural que está pintando en la fachada de un auditorio en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. Rodríguez es cofundador de la Escuela de Muralismo Siqueiros, cuyos maestros y estudiantes buscan mantener viva la práctica de usar imágenes visuales para compartir mensajes de importancia social y política.

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    Un hombre camina por la entrada del exconvento de Santa Rosa en Puebla, México, el 12 de septiembre de 2022. El antiguo convento de Santa Rosa es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

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    Los herederos del muralismo mexicano: Una peatona monta su bicicleta frente a un mural pintado por el artista mexicano Jesús Rodríguez, en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. Artistas que ayudan a revivir el muralismo o las imágenes visuales para compartir mensajes de importancia social y política, un movimiento que puso a México a la vanguardia del arte mundial hace un siglo.

  • Los herederos del muralismo mexicano: Visitantes observan el mural "Sueño...

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    Los herederos del muralismo mexicano: Visitantes observan el mural "Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central" del artista mexicano Diego Rivera en el Museo Mural Diego Rivera, en Ciudad de México, el domingo 5 de junio de 2022.

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    Pinturas religiosas del exconvento de Santa Rosa en Puebla, México, el 12 de septiembre de 2022. El exconvento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

  • Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez...

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    Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez da los toques finales a un mural que está pintando en la fachada de un auditorio en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. Rodríguez es cofundador de la Escuela de Muralismo Siqueiros, cuyos maestros y estudiantes buscan mantener viva la práctica de usar imágenes visuales para compartir mensajes de importancia social y política.

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    Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez explica el significado de un mural pintado en la fachada de un auditorio en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. Los maestros y estudiantes de la Escuela de Muralismo Siqueiros tienen la misión de mantener viva la práctica de usar imágenes visuales para compartir mensajes de importancia social y política.

  • Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Luis Manuel...

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    Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Luis Manuel Vélez retoca un mural pintado en la fachada de un edificio municipal en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. No son muralistas de renombre ni pintan los muros de edificios emblemáticos pero un siglo después de un movimiento que puso a México a la vanguardia del arte mundial intentan recuperar su espíritu: hacer arte con un fin educativo, público y político.

  • Los herederos del muralismo mexicano: La artista Luz Asturizaga se...

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    Los herederos del muralismo mexicano: La artista Luz Asturizaga se toma un descanso en la Escuela Siqueiros en Poxindeje, México, el sábado 30 de julio de 2022. La escuela tiene su sede en un centro primario reconvertido y uno de sus cofundadores es Jesús Rodríguez Arévalo, alumno de discípulos de los tres grandes maestros del muralismo: Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco. Asturizaga, una escultora boliviana de 36 años, dice que ha disfrutado cada momento de su estadía en la emblemática casa del muralismo.

  • Una de las piezas en el Museo de Arte Popular...

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    Una de las piezas en el Museo de Arte Popular del estado mexicano de Puebla, ubicado en el exconvento de Santa Rosa, en Puebla, México el 12 de septiembre de 2022. El antiguo convento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

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    Personas visitan el exconvento de Santa Rosa en Puebla, México el 12 de septiembre de 2022. El exconvento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

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    Los herederos del muralismo mexicano: La artista mexicana Janet Calderón se prepara para trabajar en un mural que está ayudando a pintar en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. El mural en proceso está en tres paredes de un edificio municipal en San Salvador, un pequeño pueblo de unos 29.000 habitantes al norte de la Ciudad de México en el Estado de Hidalgo.

  • Una vista de la cocina en el museo de arte...

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    Una vista de la cocina en el museo de arte Santa Rosa, en Puebla, México, el lunes 12 de septiembre de 2022. (AP Foto/Pablo Spencer)

  • Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez,...

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    Los herederos del muralismo mexicano: El artista mexicano Jesús Rodríguez, a la derecha, instruye a Luis Manuel Vélez durante una sesión de pintura frente a un mural que Rodríguez está pintando en la fachada de un auditorio en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022.

  • Los herederos del muralismo mexicano: El mural "Nueva democracia" del...

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    Los herederos del muralismo mexicano: El mural "Nueva democracia" del artista mexicano David Alfaro Siqueiros se exhibe en el Palacio de Bellas Artes, en la Ciudad de México, el martes 2 de agosto de 2022. Las paredes interiores del palaciego centro de artes escénicas Art Nouveau de 88 años están adornadas con famosos murales de Siqueiros, Diego Rivera y José Clemente Orozco.

  • Los herederos del muralismo mexicano: La muralista mexicana Janet Calderón...

    AP/Fernando Llano

    Los herederos del muralismo mexicano: La muralista mexicana Janet Calderón pinta un mural en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. El mural en desarrollo es pintado en tres paredes de un edificio municipal en San Salvador, un pequeño pueblo de unas 29.000 personas al norte de la Ciudad de México en el Estado de Hidalgo.

  • Los herederos del muralismo mexicano: La muralista mexicana Janet Calderón...

    AP/Fernando Llano

    Los herederos del muralismo mexicano: La muralista mexicana Janet Calderón pinta en la fachada de un edificio municipal en San Salvador, México, el sábado 30 de julio de 2022. Calderón es parte de un grupo de artistas que buscan revivir el muralismo, un movimiento que puso a México a la vanguardia mundial del arte hace un siglo.

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Si uno camina con calma por el exconvento de Santa Rosa y presta mucha atención, las paredes del actual Museo de Arte Popular de Puebla le contarán su historia.

Con más de tres siglos de existencia, el complejo ubicado al centro de México es una especie de palimpsesto. Desde 1698 fue una beatería y en 1745 se instauró como convento de monjas Dominicas. En septiembre pasado, su cocina celebró 96 años de haberse inaugurado como espacio museístico. Además, la construcción actual guarda el recuerdo de sus días en los que pasó de convento a cuartel militar, hospital para hombres con afecciones mentales y finalmente una vecindad, con todo y tendederos de ropa en sus patios, hasta mediados del siglo XX.

“La gente llega directo a la cocina y muchos no se enteran de más sobre el convento”, asegura Jesús Vázquez, historiador de Santa Rosa y entusiasta de la arquitectura de uno de los 11 monasterios que se construyeron en Puebla tras la conquista española en 1521. “No saben que hay un piso superior o algo más de su historia. Tienen pensado destinar unos 15 minutos al museo, pero cuando conocen más, se les olvida el tiempo”, agrega.

Un hombre camina por la entrada del exconvento de Santa Rosa en Puebla, México, el 12 de septiembre de 2022. El antiguo convento de Santa Rosa es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)
Un hombre camina por la entrada del exconvento de Santa Rosa en Puebla, México, el 12 de septiembre de 2022. El antiguo convento de Santa Rosa es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

La colección de arte que actualmente exhibe el museo incluye artesanías mexicanas como árboles de la vida, ofrendas indígenas y vestimenta tradicional de distintos pueblos originarios del país. Sin embargo, la joya de la corona es el espacio que atestiguó las dotes culinarias de las monjas.

La cocina se ubica en la planta baja. Años después del cierre de los conventos – consecuencia de la promulgación de las leyes que separaron a la Iglesia del Estado en México mediados del siglo XIX – esta se inauguró como Museo de la Cerámica en 1926.

Una vista de la cocina en el museo de arte Santa Rosa, en Puebla, México, el lunes 12 de septiembre de 2022.  (AP Foto/Pablo Spencer)
Una vista de la cocina en el museo de arte Santa Rosa, en Puebla, México, el lunes 12 de septiembre de 2022. (AP Foto/Pablo Spencer)

Con sus tres bóvedas, grandes ventanales y una alacena del tamaño de una habitación, la cocina es tan amplia como para albergar a una veintena de chefs trabajando en simultáneo. No obstante, el convento es engañoso: aquí no cocinaban más que dos o tres monjas a la vez. El diseño y las dimensiones del sitio se planearon estratégicamente para que hubiera espacio entre las religiosas y se abstuvieran de hablar.

Las Dominicas fueron monjas de clausura, como se conoce a quienes viven dentro de un convento por el resto de su vida. Para iniciarse en la práctica conventual no sólo hay que despedirse de la familia y del mundo exterior, sino cumplir votos que pongan a prueba la obediencia y la devoción. Para que las mujeres los acaten no sólo acecha el ojo de la Madre Superiora, sino que el convento mismo es un aliado poderoso.

Un plato de pollo en salsa de mole servido con arroz blanco y plátanos fritos, preparado por estudiantes, es servido en la Posada de los Milagros B&B, en Oaxaca, México, el 15 de marzo de 2011. (AP Foto/Luis Alberto Cruz, Archivo)
Un plato de pollo en salsa de mole servido con arroz blanco y plátanos fritos, preparado por estudiantes, es servido en la Posada de los Milagros B&B, en Oaxaca, México, el 15 de marzo de 2011. (AP Foto/Luis Alberto Cruz, Archivo)

“El espacio te obliga a cumplir el voto de humildad y reverencia”, explica Vázquez. “Sin que digas nada, la arquitectura está haciendo todo el trabajo”.

El historiador no miente. Las únicas ventanas que dan al exterior están prácticamente en el techo. No hay decoraciones que inviten a placeres de la vista. Algunos arcos de las puertas son bajos, para inclinar la cabeza ante Dios al entrar, y la comida sólo se ingería en los refectorios, comedores amplios en los que no se admitía la conversación. “Entre menos mujeres en un edificio más grande, logras ser más estricta, más contemplativa”, refiere Vázquez.

En Santa Rosa, incluso el silencio es intencional. Cuando uno está a las puertas del convento puede escuchar con claridad el sonido de los autos que circulan y los peatones que platican cerca. Sin embargo, una vez dentro del patio, el ruido se apaga. De acuerdo con el experto, esa sección del convento se diseñó para evitar que las monjas sufrieran distracciones. En la celda de la madre superiora, en cambio, la acústica cambia. Aunque ella no pudiera ver a sus protegidas, el convento le permitía escucharlas y cerciorarse de que todo estuviese bajo control.

Pinturas religiosas del exconvento de Santa Rosa en Puebla, México, el 12 de septiembre de 2022. El exconvento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)
Pinturas religiosas del exconvento de Santa Rosa en Puebla, México, el 12 de septiembre de 2022. El exconvento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

Ese pacto sigiloso que Santa Rosa mantenía con la obediencia a la doctrina incidía en las religiosas en distintos momentos de su cotidianidad. Una serie de frescos sobre las paredes altas del locutorio -donde bajo circunstancias especiales se recibían visitas- muestran por ejemplo a una monja que se arranca el corazón para ofrecerlo a Cristo. Según Vázquez, aún se desconoce cuántas paredes más podrían tener estas pinturas, pues algunas se cubrieron y otras se derribaron para crear cuartos más amplios que las celdas de las religiosas cuando el convento se convirtió en vecindad. La búsqueda sigue.

Resulta paradójico que unas monjas célebres por sus recetas nunca hayan disfrutado sus creaciones. Dado que debían ayunar, para evitar toda tentación corporal, sólo probaban su comida desde el borde de la cuchara para asegurar su sazón y luego la enviaban a la mesa de alguien más. Uno de ellos fue el virrey Tomás Antonio de la Cerda y Aragón, quien quedó tan complacido con el mole de Santa Rosa que mandó decorar la cocina que hoy tiene más de 18 mil mosaicos de una cerámica artesanal conocida como talavera.

Una de las piezas en el Museo de Arte Popular del estado mexicano de Puebla, ubicado en el exconvento de Santa Rosa, en Puebla, México el 12 de septiembre de 2022. El antiguo convento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)
Una de las piezas en el Museo de Arte Popular del estado mexicano de Puebla, ubicado en el exconvento de Santa Rosa, en Puebla, México el 12 de septiembre de 2022. El antiguo convento es ahora un museo de arte popular, pero hace más de 300 años albergaba a monjas Dominicas, que se volvieron famosas por crear el mole poblano, una receta que es una de las favoritas de la gastronomía mexicana. (Foto AP/Pablo Spencer)

Una olla y una pala de utilería se ubican al centro de la cocina para que los visitantes del museo se tomen fotos mientras simulan que preparan mole, una salsa densa hecha a base de una veintena de ingredientes, incluyendo chiles, chocolate, canela y ajonjolí, que suele acompañarse de arroz y alguna proteína. Los alrededores son tan bellos y ese platillo se ha vuelto tan emblemático de los momentos familiares de México que es difícil imaginar que surgió en silencio desde la inmensidad de un convento.