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NUEVA YORK (AP) – Las autoridades peruanas deberían investigar de forma rápida e imparcial la muerte de tres personas durante una confrontación entre la policía y manifestantes en un proyecto minero en Chalhuahuacho, Perú, declaró el martes Human Rights Watch.

La organización dijo que, según reportes locales, la violencia empezó el 28 de septiembre, cuando los manifestantes intentaron acceder al proyecto minero de Las Bambas y la policía disparó contra ellos. Al menos otros 15 manifestantes resultaron heridos, algunos de ellos con heridas de bala, dijo Human Rights Watch en un comunicado. 12 policías resultaron también heridos debido a manifestantes violentos.

“Manifestantes violentos deberían ser obligados a rendir cuentas pero lo mismo debería pasar con agentes de policía que usan el exceso de fuerza contra manifestantes”, dijo Daniel Wilkinson, director de la región de las Américas para Human Rights Watch.

El grupo es una organización sin ánimo de lucro que se dedica a la protección de los derechos humanos en el mundo.

En Chalhuahuacho unos 2.000 peruanos protestaron contra el proyecto de Las Bambas, de unos 7.400 millones de dólares, porque están en contra de la construcción de una planta concentradora para el tratamiento de sulfuros de molibdeno y otra planta de filtros, que consideran altamente contaminante.

El proyecto Las Bambas, que planea iniciar su producción de cobre en 2016, es propiedad de un consorcio liderado por la gigante estatal china Minmetals Corp, que explora, desarrolla y explota yacimientos de metales en diversas partes del mundo.

En su momento Associated Press reportó que los muertos en el enfrentamiento fueron cuatro campesinos, no tres.