ATENAS/REUTERS
EEUU apoyará a Grecia en los actuales momentos difíciles, dijo el lunes el vicepresidente estadounidense Joe Biden durante una visita a Atenas, en declaraciones que ofrecieron más apoyo en lugar de ayuda concreta.
“Estoy aquí para decirles que somos solidarios con ustedes a medida que cumplen algunos difíciles requisitos del FMI y la Unión Europea”, dijo Biden a la prensa antes de reunirse con el primer ministro griego, Lucas Papademos. “Es un momento difícil para Grecia y estamos listos para ayudar en la forma en que podamos”, agregó.
Biden viajó a Grecia antes de una cumbre clave de la UE sobre la crisis de deuda, a realizarse el viernes en Bruselas, durante la que ha sido descrita como una semana crucial para la divisa común.
Ilustrando los temores de Washington de que los problemas de la zona euro puedan afectar a la frágil recuperación de EEUU, el secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, visitará por separado a la zona euro esta semana para instar a sus líderes a actuar con decisión para controlar la crisis.
En Washington, funcionarios estadounidenses se refirieron a la misión de Geithner y destacaron que llevará consejos y aliento en vez de dinero, en momentos de severas restricciones presupuestarias en el país.
Grecia, asediada por sus problemas financieros más grandes en décadas, se mantiene a flote por un préstamo de auxilio del Fondo Monetario Internacional y de las grandes economías de la zona euro, a fin de evitar una moratoria desordenada y una salida del bloque de la divisa única, donde 17 países comparten el euro.
Algunos analistas temen que si Grecia abandona el euro, podría preceder a España e Italia, causando que toda la zona euro colapse, y Biden reiteró el fuerte deseo de Washington de evitar ese escenario.
“Es muy del interés de Estados Unidos que Grecia salga de esta crisis financiera y siga siendo una parte fuerte y vital de la Unión Europea”, aseveró.
Geithner es el principal emisario estadounidense en asuntos financieros y ha sido crucial en el esfuerzo del presidente Barack Obama por alentar a los gigantes de la zona euro -Francia y Alemania- a hacer lo que sea necesario para resolver la crisis, presión que por el momento no ha sido bien vista por Berlín y París.
Biden se apegó a una visión deliberadamente optimista de la situación.
“Creo que en tiempos difíciles, las oportunidades se presentan solas, y con mucho trabajo duro y un poco de suerte, en un año más no sólo habremos superado la crisis, sino que estaremos en una posición más fuerte. Empecemos a trabajar”, declaró.
En horas previas, Biden bromeó sobre la posibilidad de llevar dinero para ayudar a Grecia a salir de su crisis financiera más profunda en décadas.
Por su parte, el primer ministro de Grecia Papademos declaró que confiaba en que Atenas podría contar con el apoyo de EEUU.
