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GUATEMALA (AP) – La fiscal general Thelma Aldana informó el lunes que tras ser intervenida la semana pasada, la empresa Aceros de Guatemala pagó el monto por impuestos evadidos más una multa del 100% e intereses generados.

La empresa tiene seis querellas penales por los delitos de simulación de compra de chatarra y falsificación de sellos bancarios y formularios que permitieron la evasión del equivalente a unos 35 millones de dólares por tres años.

Según la ley guatemalteca, las multas por evasión fiscal son la devolución de lo evadido más el 100% y se deben de pagar los intereses generados. Las autoridades calculan que la recuperación es de por lo menos 100 millones de dólares.

“Es un caso histórico”, dijo Juan Francisco Solórzano, Superintendente de Administración Tributaria, “Es el cobro y reposición de impuestos más grande que se ha registrado”. Explicó que la empresa ya ha efectuado el pago de impuesto, multa e intereses.

La empresa en un aviso pagado en un periódico local dijo que no estaba enterada de los problemas fiscales y que está dispuesta a colaborar con las autoridades.

Solórzano, quien denunció las evasiones, explicó que la empresa fue intervenida por la institución pero que el 6 de mayo efectuó el pago correspondiente a lo defraudado, por lo que el proceso judicial sigue aunque pronto podría revertirse la intervención.

Iván Velásquez, titular de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, dijo que existía una estructura entre funcionarios y empresarios para evadir al fisco y que la estructura tenía dos objetivos fundamentales: “librar a Aceros de Guatemala de la causa que se tramitaba en el juzgado” y “limpiarle record” en el sistema de tributación para que pudiera cobrar el crédito fiscal sin haberlo generado.

Solórzano dijo que este caso es una llamada de atención para las empresas que evaden impuestos. “les va a salir más barato pagar impuestos que eludir la obligación tributaria”, dijo.

Tanto la fiscalía como la Comisión, un órgano de Naciones Unidas que investiga grupos paralelos incrustados en el estado guatemalteco, dijo que respaldan las acciones de Solórzano, pues con su gestión se pretenden limpiar la institución que anteriormente estaba coludida con los empresarios para evadir impuestos.