BOSTON (AP) – Tim Kaine ofreció un panorama esperanzador al considerar que una Casa Blanca demócrata podría trabajar con republicanos a fin de crear puentes ante las divisiones que han sido puestas al descubierto por esta amarga campaña presidencial.
El candidato a la vicepresidencia dijo el sábado a The Associated Press que él y Hillary Clinton de antemano han hablado sobre la manera de sanar al país en caso de ganar las elecciones. Señaló que el hacer frente a las ansiedades económicas, el encontrar un punto político en común con el Partido Republicano e incluso incorporar republicanos a su gobierno serían elementos de unidad, si bien aclaró que él no ha hablado con Clinton sobre puestos en su gabinete.
“No tenemos que realizar esta campaña como una campaña contra el Partido Republicano de forma general -tenemos que realizarla contra Donald Trump”, subrayó Kaine, que predijo que “vamos a obtener muchos votos republicanos y esto también será parte, de manera inmediata, de la forma para unir a la gente de nuevo”.
La campaña de Clinton ha estado preparándose ante la posibilidad de que Trump no acepte el resultado de las elecciones en caso de resultar el perdedor, con base en sus afirmaciones de que la contienda está amañada. Kaine indicó que él no ha hablado con Clinton respecto a ese escenario.
Autoproclamado un candidato poco favorito, Kaine reveló que apenas recientemente empezó a reconocer la verdadera posibilidad de ganar la contienda. Ha contratado a Wayne Turnage, un ex jefe de personal, como su director de transición y analiza los asuntos que abordará como vicepresidente.
“Es probablemente apenas en las últimas dos semanas que he empezado a pensar en ello, bien, la posibilidad de ganar es tal que más vale que empecemos a pensar en algunas cosas factibles”, dijo Kaine.
Como vicepresidente, Kaine agregó que espera ser crucial en forjar las relaciones entre el gobierno federal y los alcaldes y gobernadores. Kaine fungió como alcalde de Richmond y gobernador de Virginia antes de ganarse un escaño en el Senado en 2012. Añadió que también desea ayudar a dar forma a la política de Estados Unidos en Latinoamérica, debido a su fluidez en español y su experiencia como misionero en Honduras.
Kaine sigue siendo de cierta forma un intruso en el mundo de Clinton. Ella ha desarrollado relaciones de confianza con varios asistentes a lo largo de décadas y Kaine es una nueva adición a la mezcla.
Por momentos se ha encontrado desactualizado en eventos de gran magnitud, como el desconocimiento sobre el diagnóstico de neumonía de Clinton en septiembre, hasta varios días después. Rara vez realizan campaña juntos, pero se comunican por mensajes de texto, correos electrónicos o teléfono. A veces hablan una vez cada cierto tiempo, pero podría pasar hasta una semana sin que se comuniquen, detalló Kaine.
La aparición de ambos programada el sábado en Pennsylvania, fue su primer evento juntos desde el Día del Trabajo.
Pero Kaine dijo no estar preocupado por no tener mucha influencia en el gobierno de Clinton y anticipa ser su principal asesor en los temas más complicados en caso de que gane los comicios. Cree que Clinton lo eligió a él sobre viejos confidentes específicamente por no ser parte de su círculo interno desde hace tiempo.
Kaine dijo que su experiencia en Virginia como vicegobernador y presidente del Comité Nacional Demócrata durante el primer término del presidente Barack Obama le ha enseñado a ser un sólido asesor y un valioso activo para Clinton.
Kaine podría estar en buena posición para trabajar con los republicanos luego de haber ganado tres contiendas electorales como vicegobernador, gobernador y senador, en el estado de Virginia, que históricamente ha sido republicano, aunque la entidad gradualmente se ha inclinado por los demócratas en contiendas presidenciales. Actualmente en su cuarto año como senador, dijo que ya dialoga con republicanos para trabajar de manera conjunta luego de las elecciones.