STONE PARK – Al coro de “Allure fuera de nuestra comunidad”, un grupo de religiosas y residentes de Stone Park caminaron del convento de las misioneras scalabrinianas San Carlos Borromeo al club de caballeros Allure para pedir su cierre.
Los manifestantes alegan que el club viola una ley estatal que indica que debe haber 1,000 pies de distancia entre un club de entrenamiento para adultos y un centro de culto, y estos están separados sólo por una barda de alambre. De ahí la molestia de las religiosas.
A vecinos, por otro lado, les preocupa la seguridad de sus familias.
Dayanara Moreno, de 15 años, dijo que antes de la apertura del club podía caminar segura, y ahora la cosa ha llegado al punto que fue seguida por sujetos en autos y le han llamado majaderías.
Irma Hernández, una residente, dijo que su familia se mudó a unas cuadras más lejos del club luego que vecinos encontraron jeringas regadas.
“Ahora rentamos, pero si compráramos una casa, nosotros no compraríamos en Stone Park”, dijo Hernández, de 42 años.
Hernández, quien es madre de tres hijos, se quejó que el gobierno de Stone Park, permite abrir más centros de adultos, ya son siete en esa municipio, pero no construye parques o bibliotecas.
Vecinos y las religiosas ya habían protestado contra la apertura del club al indicar que hay demasiados en esa comunidad
Sean O’Brien, un manager del club, dijo al diario Chicago Tribune, que “no entiendo por que no nos quieren. Tenemos diferentes ideologías sobre las cosas, y sobre cómo la vida debe ser vivida”, y rechazó los alegatos de que el negocio cause las molestias que los manifestantes describen.
Sin embargo, la hermana Almarosa Huerta, indicó que no se trata de ideologías, sino del hecho que el club viola una ley estatal.
Al hablar de la ley, Dean Krone, un abogado de Stone Park, indicó que la legislación es inconstitucional porque es demasiado amplia al prohibir ese uso dentro de una milla de un centro de culto.
La hermana Huerta dijo, que tras la demanda contra el club por violar la ley, planean realizar vigilias de oración frente al club a partir del viernes 20 de junio por la noche para pedir su cierre. Estas vigilias se realizarán cada viernes de manera indefinida.
Por otro lado, los manifestantes pidieron los residentes que observen situaciones irregulares cerca al club que los reporten al (708) 600-7364.
